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17 mayo 2016

R#127: Arte en la sangre | Bonnie Macbird

15 comentarios:
- Arte en la sangre.
- Bonnie Macbird.
- Editorial: HarperCollins.
- 267 páginas.
- 17,90€

Londres. Un diciembre nevado, 1888.

Sherlock Holmes, de 34 años, languidece y ha vuelto a la cocaína tras una desastrosa investigación sobre Jack el Destripador.
Watson no logra consolar ni reanimar a su amigo, hasta que llega de París una carta codificada de modo extraño. Mademoiselle La Victoire, una hermosa cantante de cabaret francesa, cuenta que el hijo ilegítimo que tuvo con un lord inglés ha desaparecido y que ella ha sido atacada en las calles de Montmartre. Acompañado de Watson, Holmes viaja a París y descubre que el niño desaparecido es solo la punta del iceberg de un problema mucho mayor: la estatua más valiosa desde la Victoria de Samotracia ha sido robada de forma violenta en Marsella, y han encontrado asesinados a varios niños de un telar de seda en Lancashire. Las pistas en los tres casos apuntan a un hombre intocable.

¿Conseguirá Holmes recuperarse a tiempo para encontrar al chico desaparecido y poner fin a la ola de asesinatos? Para hacerlo, tendrá que ir siempre un paso por delante de un peligroso rival francés y esquivar las amenazadoras intromisiones de su propio hermano, Mycroft.
Esta última aventura, al estilo de sir Arthur Conan Doyle, manda al icónico dúo desde Londres hasta París y de ahí a los páramos helados de Lancashire en un caso que pone a prueba la amistad de Watson y la fragilidad y el talento de la naturaleza artística de Sherlock Holmes.


Muchas gracias a la editorial por el ejemplar.

¡Hola a todos! Hace meses que vi la portada... y me enamoré, fue un flechazo, amor a primera vista. Sherlock Holmes y el querido Watson son una parte más de mi vida como lectora y como cinéfila. Así que encontrar un libro que pretende crear una nueva historia puede ser o una muy buena idea o la peor del mundo. Decidí no tener ningún tipo de expectativas con él, ya me había enfrentado a libros que terminaron en fracaso total, así que tocó embarcarse en un viaje acompañando a nuestros personajes por varios países.




Junto a este precioso paisaje empecé el libro, y desde el prólogo supe que me gustaría, y os juro que no había leído ni una sola reseña ni NADA sobre él. Solo necesité el prólogo (además de su portada) para saber que ese era el libro que hacía tanto tiempo que buscaba. La autora nos habla directamente a nosotros, y lo hace de una forma que les da vida a los personajes, siendo Watson quien nos escribe un libro con una trama nueva, pero paso a paso >.<

La historia está narrada por Watson, y después de casarse lleva un tiempo sin ver a su gran amigo y compañero de aventuras, Sherlock. Y recibe una mala noticia, se ha incendiado el 221B, así que no duda ni un solo momento en ir a socorrerle. Entonces encuentra a un Sherlock decaído, mucho más delgado y con una apariencia de enfermo. Descubre que es adicto a la cocaína y que lleva mucho tiempo sin un solo caso, eso a provocado que esté desanimado (si a eso le sumamos que ha tenido algún que otro percance en el que Jack el Destripador está en medio).

El arte en la sangre puede adoptar las formas más diversas.

Pero poco después que vuelvan a estar juntos se hace la luz, un caso en Francia, esta vez es una damisela en apuros que quiere saber dónde se encuentra su hijo, Emil, al cual no puede ver, solo un día al año, es el único día que puede verle y hablar con él, pero esta vez la visita se cancela y no sabe porqué... solo que contra más pregunte o investigue será peor. Así que se embarcan en un viaje para encontrarse con mademoisselle La Victorie, una reconocida cantante que esconde un gran secreto. Normalmente habrían descartado el caso, pero la señorita envío las cartas con mensajes encriptados dando el nombre del padre de su hijo, un reputado conde sobre el cuál hay una investigación paralela.

Emil es fruto de un desliz entre el conde y la cantante, que para entonces no era nada conocida. Ambos decidieron hacer un pacto por el cual sería criado por el conde y su mujer, la cuál sería la madre para todo el mundo, a cambio de cumplir su sueño y una visita anual. Lo que parece en un principio una sencilla investigación tras cada paso que dan hacía el niño van surgiendo más y más problemas haciendo que el caso se complique y coja mayor magnitud. Supuesto secuestro o desaparición de un niño, robos de obras de arte, asesinatos, explotación infantil... entre otras. Así que iremos conociendo como se van entrelazando todos los caminos de una forma excepcional al puro estilo de Doyle.

El arte, como la moral, consiste en trazar la línea en alguna parte.


Mientras leía Arte en la sangre no había momento en el que pudiese pensar que este no era uno de los libros que prosiguen las historias de Sherlock Holmes. Macbird nos lleva hasta un Londres victoriano con un protagonista decaído, que como los artistas sin inspiración pierde la fuerza, y con un Watson fuerte que a pesar que Sherlock no sea una persona fácil le ayuda en todo momento y lucha por seguir adelante. Quizá la única diferencia que he visto con los demás libros es por el caso, como he dicho va evolucionando y como una bola de nieve conforme avanza se hace más y más grande (y peligroso), pero todo empieza con una madre rota que necesita encontrar a su hijo. Es capaz de hacer lo que sea y sacar toda su fuerza solo por saber dónde está, si está bien y sobretodo para verle. Pero tal y como lo haría el creador de los personajes la autora es capaz de darle la vuelta a todo y cuando menos te lo esperas darle un giro completo a la trama. Agradezco muchísimo que haya conservado la esencia de los personajes, puede que en este caso haya potenciado el papel de Watson, pero a aquellos fans de Holmes es un capítulo más allá de lo que nos dejó Doyle.

Obviamente no diré que lo recomiendo así sin más, es un libro que si no has leído nada sobre ellos, pero si sabes quienes son los personajes debes leerlo, si los has leído debes leerlo... ¿A qué esperas para leerlo?