- Tú,¿qué crees que estás haciendo aquí?- le dije a Jadiel.
- Creo que sabes perfectamente que no puedes esconderte, vayas dónde vayas te encontraremos. Ahora atiende a tus clases Cam.
Camila
Creo que la gente merece una explicación a todo lo que sucedió, y a lo que está por suceder. No me llamo Camila, ahora al mudarme a Lleida, una ciudad tranquila, pequeña, quise rehacer mi vida, nuevo nombre, nuevo futuro... pero Jadiel me ha vuelto a encontrar.
Mi nombre real es Anne nací en Dinamarca hace unos cuantos años, he perdido la cuenta, solo puedo decir que hace mucho tiempo que tengo 17 años. Mi familia es reconocida mundialmente por sus tradiciones poco convencionales, y que hoy en día se estudian en las clases de artes e historia oscura.
Con mis primeros 14 años mi familia necesito cambiar de población, así que nos sumamos a una expedición hacia Irlanda, donde se arrasó con la población... éramos unos bárbaros. Fue allí donde conocí a Jadiel.
Jadiel era un miembro del equipo de pillaje que papá, pero el no era danés, era Lochlann, noruego. Consiguió arrasar ciudades enteras y entregarle la fortuna a mi padre Grom el viejo, eso le convirtió en un héroe y me prometieron con él. Efectivamente yo estaba perdidamente enamorada de él, era alto, rubio, sus ojos del color del mar Báltico. Y como buen... llamémosle bárbaro tenía el cuerpo musculado a la par que lleno de cicatrices de guerra acumuladas en sus hazañas persiguiendo mi mano. Mientras yo tenía 14 años, él ya tenía 17, en ese momento era una edad bastante avanzada y necesitaba mujer e hijos. Nuestra tradición no es/era como la europea, la mujer no era solo para servir y parir, la mujer era casi una igual del hombre, fuerte y dura. Las mujeres éramos libres, y mandábamos en el hogar aunque también teníamos nuestras normas, ya iré explicando.
Cuando estuve apunto de cumplir 15 años, Jadiel y yo nos casamos, fue una boda que duro varios días, donde se celebro la libertad de Jadiel. El acto en sí del matrimonio fue muy estándar, teníamos que cumplir estrictamente las tradiciones, tuvimos que rendir culto al hogar, a la guerra, a los dioses, etc. Y finalmente mi padre, el Rey nos casó en la segunda ceremonia, me vistieron con ropajes de claros, con las llaves de los dotes a la cintura, y la corona de flores que preparo mi madre en la cabeza. Mientras Jadiel vestía la indumentaria de guerrero, para poder hacer el sacrificio a la Diosa Madre y a Thor.
Me gusta mucho, ¿cómo continuará? ¡Quiero más! Un abrazo.
ResponderEliminarMenos mal que me explicas algo xD bueno bueno la que se va a liar... jajajaj
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